El pequeño Goyo ha tenido una gran acogida en su nuevo hogar. Rafa y Maribel lo han adoptado, y también lo ha hecho Coco, el otro gato de la casa, que se ha convertido en su nuevo tato.
Se han hecho compañeros inseparables de juegos, lametones y siestas.
¡Qué suerte ha tenido Goyo con esta familia! ¡Muchas gracias por hacerle un hueco en vuestras vidas!